Existen numerosas adicciones, aunque una de las más comunes y menos notables es la adicción a la comida. Solemos tomar tres comidas al día, pero ¿qué me dices de picar entre horas? Lo hacemos sin darnos cuenta o de forma consciente sin conocer los problemas que pueden conllevar.
Detecta si tienes una adicción a la comida
El primer paso para ver si sufrimos una adicción a la comida es conocer de qué trata realmente esa adicción y cuáles son los indicadores.
¿Qué es una adicción a la comida?
Es un trastorno psicológico que trata de consumir constantemente determinados alimentos. Destaca porque la persona que lo sufre pierde completamente el control. Su cuerpo se entrega y no es consciente de lo que ocurre.
Los expertos difieren a la hora de clasificar esta adicción. Unos dicen que se debe a la sustancia en sí, mientras que otros opinan que el origen está en el comportamiento. La realidad es que existen más estudios que demuestran la última teoría.
Indicadores que pueden descubrirlo
Como en cualquier adicción o trastorno, nuestro comportamiento puede demostrar si lo sufrimos. Estas son las señales más comunes si sufre una adicción a la comida:
- Negar que tienes un problema o la gravedad del mismo, manteniéndolo en secreto
- Estar obsesionado por los alimentos
- Intentar constantemente en dejar el problema, pero siempre fracasar
- Perder el control o la noción del tiempo
- Conocer las consecuencias negativas del problema, pero aún así seguir haciéndolo
Causas de la adicción a la comida
Las causas más comunes de las adicciones en general vienen de estados emocionales y características de personalidad. Estos son los principales:
- Problemas familiares, profesionales o sociales
- Depresión, ansiedad y estrés
- Sensación de ser un fraude o una decepción
- Tener impulsividad por placeres a corto plazo
- Falta de afecto o relaciones sociales (aislamiento)
- Baja autoestima
Consecuencias de la adicción a la comida
La adicción a la comida puede parecer que no produce consecuencias graves a primera vista, sin embargo, puede derivar rápidamente en problemas preocupantes para la salud física y mental.
Una persona que sufre este tipo de adicción es más propenso a sufrir diabetes, hipertensión, problemas cardiovasculares, trastornos digestivos, colesterol alto o sobrepeso u obesidad.
Ahora bien, los problemas no terminan en el aspecto físico, sino que suelen llevar incluidos en la mayoría de casos consecuencias mentales como: depresión, ansiedad, culpabilidad, rechazo del aspecto físico, irritabilidad y cambios de humor.
La adicción a la comida puede provocar anorexia, bulimia o el trastorno por atracón. Depende de cada cuerpo, pero si reconoces personalmente que tienes un problema de adicción, te recomendamos encarecidamente que contactes con un especialista en psicología y nutrición. Es importante detectar y combatir a tiempo esta clase de problemas.
Alimentos que fomentan la adicción a la comida
Los alimentos más adictivos son aquellos que retrasan la sensación de saciedad. Estos hacen que queramos más y más sin tener un límite. Los hidratos de carbono, las grasas y los azúcares son los más adictivos de todos. Son alimentos que son deliciosos y no somos conscientes del peligro que conllevan si se ingieren en cantidades abundantes.
Otras comidas con sal, o los snacks son muy fáciles de comer, eso hace que no nos demos cuenta del ritmo que llevamos al ingerirlos. Al ser ligeros, también favorecen la sensación de que no nos han llenado.
En la industria alimentaria se emplea el azúcar en niveles inimaginables. El azúcar tiene un poder adictivo inmenso y es por ello, que las industrias lo introducen en los alimentos procesados, para que así compremos con más frecuencia. La comida basura es una de las principales portadoras de azúcar, y el hecho de que sea barata y podamos encontrarla en cualquier lugar ha favorecido un auge de la adicción y la obesidad.
¿Cómo tratar una adicción a la comida?
La familia
Para tratar la adicción a la comida, la familia es la primera opción. Hay que recordar que deben ayudar de buena fe y no culpabilizar o enfadarse, porque de lo contrario, se puede empeorar la situación o complicar la salud mental de la persona que sufre la adicción.
Los familiares deberán funcionar como terapeutas supervisando que no haya recaídas y hablando del problema libremente con el adicto. El apoyo es muy importante ya que el paciente estará en una situación mental muy vulnerable.
Ayuda profesional
En caso de complejidad o que se prefiera ayuda profesional, recomendamos el apoyo de especialistas en psicología y nutrición. Los nutricionistas ayudarán a mantener un hábito alimentario sano, mientras que los psicólogos detectarán la causa del problema, las situaciones que llevan a la pérdida de control y los pensamientos dañinos del propio paciente.
De esta forma, el paciente podrá reconocer los elementos externos e internos que causan su problema, para identificarlo la siguiente vez que ocurra y así evitarlo.
Si el caso fuera extremo, siempre se puede pedir atención en centros especializados para la desintoxicación. Solamente para casos muy graves donde la salud del paciente se encuentra demasiado deteriorada.
En Auramed, contamos con los especialistas adecuados para tratar problemas de esta índole. Puedes pedir cita en nuestra unidad de nutrición para recibir ayuda psicológica y nutricional. Te haremos un plan inicial para solucionar tu problema, y si estás de acuerdo, lo pondremos en marcha con las facilidades y el seguimiento que necesitas.
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